Te espero en las Termópilas

SINOPSIS

Un grupo de viejos amigos decide realizar una escapada a la montaña, para recordar sus viejas hazañas de juventud. Durante su visita al monte, descubrirán que ya no están tan preparados para hacer las locuras que hacían de niños; ni adolescentes, como recordaban. Pero que sí mantienen su gran amistad y su buen humor, ante cualquier contratiempo que se les ocurra. Vivirán una historia rocambolesca, caótica y extrema, que los llevará a revivir los mejores años de sus vidas y a reírse, como nunca antes se habían reído.

Tapa Blanda con solapas
Formato: 15X21 cm
Hojas: 202 páginas

BIOGRAFÍA

Me llamo Guillermo Ponce Ramírez y nací hace 32 años, justo en el día de los Santos Inocentes; ¡menuda broma!, en Valencia, en el seno de una familia de clase obrera; procedente de Córdoba y emigrante a Francia, por parte de madre, y de Burjassot, por parte de padre. Con una niñez llena de altibajos emocionales, debido a la ausencia que sufría por parte de mis padres, ya que la situación económica familiar requería un esfuerzo extra por parte de ambos; viví gran parte de mi infancia acunado por mis abuelos maternos y a cargo de mi hermana menor. Hecho que llevó a madurar a muy temprana edad y a responsabilizarme de tareas, que no competían a un niño de menos de 12 años. Nuestras horas de vida familiar, se podían contar cada día, con los dedos de una mano. Hechos, cuestiones y problemas, que desembocaron en el divorcio de mis padres, la venta de nuestro hogar y la separación de la familia. Yo tenía 14 años.

Con mis abuelos crecí enormemente. Mi abuela me enseñó lo duro que era llevar las tareas de un hogar, además de aprender a comer de todo. Mi abuelo, en paz descanse, me enseñó a ser la mejor versión de mí mismo, además de convertirse en uno de mis mejores amigos. 

Terminé los estudios a los 20 años. Edad a la que me emancipé totalmente y comencé a vivir mi propia vida, libre de ataduras familiares. Seguía trabajando, quedando con mis amigos, veía a mi familia (no a mi madre, quien se fue a vivir a Barcelona durante una larga temporada) y, sinceramente, era muy feliz. Pero, a quien más veía, era a mis amigos. En quienes siempre encontré un refugio y un apoyo incondicional ante todo lo que me pasara. Que siempre han estado ahí y espero que siempre lo sigan estando. Son mi familia electa y no los cambio por nada. Y de ese mismo grupo de amigos, nació un amor incondicional entre mí ahora esposa y madre de mis hijas y yo. Un amor que no concebían en mi familia, pues parecía que las malas lenguas no querían que yo estuviera “con esa chica. Esa mujer, es la mejor persona que yo he conocido jamás y a la que le agradezco cada día el haberme elegido como marido y haberme dado las dos princesas que tenemos en nuestras vidas. 

En resumen: a pesar de que mi vida ha sido una debacle de sentimientos en todos los sentidos y de que, durante unos cuantos años, fui un corazón negro y duro como una piedra, he de reconocer que, gracias a todo ello, ahora soy como soy: la (casi) mejor versión de mí mismo. Y digo: casi; porque espero seguir mejorando cada día más, sin descanso.

Ah, por cierto, mis aficiones son las series de televisión, algún que otro anime, el cine, la naturaleza y los videojuegos poco comerciales. Hobbies que han inspirado muchas de las locuras que hicimos mis amigos y yo en nuestra juventud y que han sentado la base de esta historia que aquí os quiero narrar. Además de escribir, evidentemente, y dibujar.

¿POR QUÉ HE ESCRITO ESTE LIBRO?

Escribir me parece una vía de escape del estrés de la vida, ENORME. Sé que quiero intentarlo, porque, sencillamente, me encanta. Me vienen historias a la mente y siento la necesidad de plasmarlas. Si tuviera más tiempo libre al cabo del día, escribiría miles de historias cortas, simplemente como entretenimiento. Me siento inspirado por el cine, por los videojuegos, por la misma naturaleza que nos rodea o por la maravillosa mente de mi hija de 5 años, incluso, en ocasiones por mi bebé de 8 meses. Te espero en las Termópilas, no es mi primer escrito.

Realmente, esta afición se remonta a cuando tenía 18 años y una compañera del trabajo me pidió que le escribiera un cuento para su cumpleaños. Lo hice y descubrí, que no solo me había divertido mucho haciéndolo, sino que se me daba bien. Eso me llevó a continuar escribiendo y fue, hace ahora 7 años, en pleno 2012, cuando escribí esta obra. Si, sé que he tardado muchos años hasta que me he animado a publicarla oficialmente, pero es que necesitaba el empujoncito definitivo para hacerlo. Mi primer escrito, hablaba sobre el primer trabajo que tuve y estaba narrado en tono terrorífico. Ahora estoy escribiendo dos historias más. Una, es una historia de viajes en el tiempo, como nunca antes se había visto; y la otra, es TOP SECRET.

¿POR QUÉ DEBERÍAS APOYAR A MI LIBRO?